Por: Florencia Escobedo/Observatorio Digital
Beatriz Hernández, de 24 años, es originaria de la Huasteca Potosina, pero trabajaba en Aguascalientes, en la empresa llamada JATCO, junto con su pareja Rosa Olivia Saucedo Zermeño, de 25 años. El pasado 27 de julio de 2023 Beatriz y Olivia salieron de Aguascalientes rumbo a Encarnación de Díaz, Jalisco, a visitar a las hermanas de Olivia, Adriana Saucedo Zermeño, de 22 años y Marisela Saucedo Zermeño, de 28 años.
Adriana y Marisela vivían en la comunidad de Las Chivas, a donde Beatriz y Olivia las fueron a visitar. En algún momento del día 27 de julio, Olivia, Beatriz y Adriana salieron del domicilio para hacer un mandado, siendo ésta la última vez que se les vio. De acuerdo con la información recabada por la familia, el 28 de julio, un comando armado sustrajo a la fuerza a Marisela de su casa en Encarnación de Díaz.
Fue el Observatorio de Violencia Social y de Género de Aguascalientes quienes el 2 de agosto, emitieron las fichas de búsqueda después de que la familia pidiera acompañamiento. El caso de Beatriz y las hermanas Saucedo Zermeño está plagado de omisiones y opacidad por parte de las autoridades, ya que al igual que otros casos, las Fiscalías de las dos entidades no lograron coordinarse de manera adecuada, evadiendo sus obligaciones y responsabilidades.
La Comisión de Búsqueda de Personas de Jalisco, tardó en emitir las fichas de búsqueda, ya que por seguridad, la denuncia se había presentado en el Estado de Aguascalientes. De manera tardía, las Fiscalías comenzaron con las acciones de búsqueda. Contrario a lo que indica el Protocolo Homologado de Búsqueda, lo hicieron sin mantener comunicación con las familias y sin incluirlas en las acciones, violentando así los derechos de las familias.
El 31 agosto de 2023, las familias de las jóvenes se enteraron a través de los medios de comunicación, que se había vinculado a proceso a un hombre llamado Gustavo “F”, quien se encontraba en prisión preventiva. Supuestamente, el hombre era pareja de una de las mujeres y es el principal sospechoso de las desapariciones.
“Al día de hoy, las autoridades siguen sin haber levantado la muestra de ADN a las familias y sin tener comunicación con ninguna de las dos familias, ellos (las autoridades) dicen que sí han mantenido comunicación, sin embargo las familias desconocen con quién. Estamos ante un proceso profundamente omiso, en uno de los estados con el mayor número de niñas y mujeres desaparecidas y con un alto grado de impunidad en tema de búsqueda de personas desaparecidas, que cada día va creciendo” Comentó Mariana Ávila Montejano, fundadora del Observatorio de Violencia Social y de Género de Aguascalientes.
De acuerdo con el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO), en el estado de Jalisco hay 14,896 personas desaparecidas y no localizadas, el municipio Encarnación de Díaz tiene un registro de 199 personas desaparecidas y no localizadas.
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