Por: Georgina Martínez
Desde el 2017, la comunidad de Santa Maria Gallardo, ubicada al nororiente de la ciudad de Aguascalientes, sufre un ecocidio tras la extracción de materiales pétreos de manera ilegal. Integrantes del Frente de la Lucha Campesina y la comisaria, solicitaron atención de manera inmediata a las autoridades por los daños ambientales que vive la comunidad.
“Ya estamos desesperados del gran ecocidio que se está dando en nuestra comunidad, nos preocupa a todos, es un daño descarado y no sabemos a beneficio de quien, está sucediendo esto”, compartió un Integrante del Frente, en representación de 75 ejidatarios.
Las y los habitantes de la comunidad, aseguraron que Jesús NN es el presunto responsable del saqueo que sufre la comunidad. Jesús NN es ex residente de Santa María Gallardo, distribuidor particular de materiales pétreos, exclusivos de la construcción (arena, grava, piedras), los extrae de los cauces del los rios de la comunidad: Río Chicalote, El Bordo, El Gigante, entre otros. Dañando así de manera irreparable los cuerpos de agua, flora y fauna, entre ellos mezquites de más de 200 años de antigüedad que tienen un gran aporte ambiental.
Los ejidatarios desde principios de este año han presentado denuncias y solicitudes de atención a las dependencias correspondientes CONAGUA, PROFEPA, SEMARNAT, PROESPA, incluso han buscado la atención federal para detener los daños ecológicos que viven. Pese a que CONAGUA ha hecho revisiones, la comunidad comenta que las extracciones clandestinas son en horarios y días en los que no laboran las dependencias y por ello no han logrado capturarlo.
La comunidad afirma que el sujeto ha manifestado tener protección de estas dependencias y se desconoce a dónde lleva el material, también el monto económico del cual se beneficia.
“Tiene varias denuncias ya en registro, pero vamos a CONAGUA y nos dicen que él no tiene permiso de nada, pero tampoco hacen nada, eso nos hace pensar que pueda tener vínculos o acuerdos con las autoridades”, añadió el Frente de Lucha Campesina.
No solo la situación preocupa a los ejidatarios, sino, que temen por su vida, ya que han recibido amenazas de muerte por defender su territorio.
Por su parte, la ejidataria Maria Sanchez, expresó su descontento ante los procesos burocráticos en las dependencias de medio ambiente y la forma en que han perdido dinero por solicitar investigaciones de las cuales aún no han obtenido resultados.
“Aguascalientes no rebasa el 30% de la media nacional en lluvias, además vivimos un gran estrés hídrico. Si las autoridades competentes no actúan, vamos actuar nosotros, aun con los riesgos. Nuestra obligación es defender a la naturaleza, necesitamos hacer un uso racional del agua”,concluyeron los ejidatarios.
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